
La veterana actriz Nuria Espert se sube al escenario del Auditorio de León con “La isla del aire”, adaptación teatral de una obra de Alejandro Palomas, bajo la dirección de Mario Gas. Una historia en femenino sobre el duelo, la familia y los secretos que la separan. Podrá verse este jueves, 16 de noviembre, a partir de las 20:30 horas. Las entradas tienen un precio de 22 euros y están incluidas dentro del abono de adultos.
“La isla del aire” es una producción deT eatre Romea que cuenta la historia de una familia de cinco mujeres, basada en la novela “El tiempo que nos une” de Alejandro Palomas. “El duelo, el mío, tiene voz y está aquí, en este viaje entre poemas, recuerdos en vivo y diálogo con la madre que sigue aquí, sobre mi hombro, aunque nadie más la vea. Este es un texto hecho con los retales vivos de la piel, el ombligo, los ojos, el pelo y toda la luz que conservo de ella”, explica su autor.
Las actrices Vicky Peña, Teresa Vallicrosa, Clàudia Benito y Candela Serrat, junto a Nuria Espert que encabeza el elenco, dan vida a las cinco mujeres que protagonizan este montaje dirigido por Mario Gas.
La trama de la obra está ambientada en Menorca, donde cinco mujeres de una misma familia – la matriarca Mencía, sus dos hijas Flavia y Lía y las dos hijas de ésta, Inés y Bea- deciden salir de excursión en barca a la Isla del Aire. Sobre ellas planea la desaparición de Helena, la nieta mayor, y el dolor que Lía aún no se ha atrevido a sentir por la pérdida de su hija. El viaje aunque breve, será la excusa para que Mencía obligue a sus hijas y nietas a enfrentarse a la verdad y a los secretos que ocultan. Como explican desde la propia compañía es una obra sobre los silencios y la búsqueda de la misma luz.
“Todos estamos conmovidos por esta extraña y honda historia de amor”, destaca su director Mario Gas, “por esta historia que nos habla de frustración, dolores callados y esperanza. Sólo depurando el pasado se puede avanzar libremente. Y los personajes femeninos de Palomas están dispuestos a hacerlo. Alcanzar la libertad personal en una epifanía renovadora. Y lo harán. Quieren hacerlo. Y quieren vivirlo. Juntas”.
