“Danza en el Camino” recala en Mansilla de las Mulas y Carracedo

(IìOR). Certamen Coreográfico de Sabadell. Fotografía: Efreìn Montoya.

El festival itinerante, organizado por la Consejería de Cultura y Turismo de la Junta de Castilla y León en el marco del 22º Certamen Internacional de Coreografía Burgos & Nueva York, llega este lunes 17 de julio al Museo de los Pueblos Leoneses de Mansilla de las Mulas y un día más tarde, el 18 de julio, visitará el Monasterio de Santa María de Carracedo. En ambas citas, a las 21:00 horas, se podrá disfrutar de la puesta en escena de tres espectáculos, inspirados en la historia, el arte y los valores culturales del Camino de Santiago.

La entrada es gratuita hasta completar aforo y el público podrá otorgar, con sus votaciones, un premio a la mejor de las propuestas escénicas.

“Somos”, que firman las coreógrafas Carla Cervantes Caro y Sandra Egido Ibáñez; “Lucero”, de Alejandro Moya González; e “(Íor)”, a cargo de Marc Fernández Mercadé, son los tres espectáculos que se podrán ver en Mansilla de las Mulas y en el Monasterio de Santa María de Carracedo. Tienen en común su particular forma de vincular la danza contemporánea, los nuevos lenguajes coreográficos urbanos y la historia y arquitectura del Camino de Santiago.

La primera de las obras a concurso en esta quinta edición del ciclo lleva el sello de Carla Cervantes Caro y Sandra Egido Ibáñez. Interpretada por las propias coreógrafas, “Somos” es un dúo de danza donde el lenguaje y el movimiento corporal dialogan con la intención de transmitir un mensaje íntimo que reivindica el valor de los momentos presentes.

Por su parte, “Lucero”, de Alejandro Moya González, surge -destaca su creador- como un encuentro, un rito, una historia de amor entre un hombre y un objeto: un capote. Un encuentro para dar vida a lo inanimado, para enamorarse de lo que no se ve, del vacío que rellena las formas y de los sentimientos que habitan ocultos detrás de acciones. Es también un homenaje, una búsqueda de las raíces y una forma de situarse en relación a ellas. La tercera y última de las piezas lleva el título de “(Íor)”. Marc Fernández Mercadé interpreta una pieza que se mueve entre la dureza y fragilidad, y que lleva a escena dos cuerpos «en busca de la simbiosis perfecta que les permita, juntos, seguir avanzando”, afirma el autor.