El investigador y activador agroecológico Marc Badal presenta este 12 de abril en la biblioteca de la Fundación Cerezales Antonino y Cinia el libro “Geografías de la ingravidez”, en el que reflexiona sobre la desaparición del mundo campesino. Dará comienzo a las 18:00 horas.
La visita de Marc Badal a Cerezales ha contado con una doble sesión: un taller de manejo de semillas, este pasado jueves y la presentación de “Geografías de la ingravidez”. Un libro en el que trata de desentrañar el proceso por el cual nuestras sociedades han dado la espalda a la tierra y, creyéndose capaces de vivir al margen de ella, han confundido el desarraigo con la emancipación.
De ese modo, hemos constituido una geografía ingrávida que, en dos generaciones, ha hecho olvidar el papel esencial jugado por los pueblos campesinos para conformar nuestro mundo. Badal recuerda que el precio a pagar por el privilegio de habernos liberado de una vida apegada a la tierra no es otro que el de estar permanentemente desubicados. Ya no sentimos ningún sitio como propio: estamos siempre fuera de lugar. “Hemos olvidado que somos los descendientes directos de los últimos campesinos y que nuestra existencia está completamente determinada por la renuncia a un legado cultural que, en vano, intentaron transmitirnos. Es decir, no somos solamente los huérfanos del campesinado. Somos aquellos que optaron por convertirse en sus desheredados”.
Investigación y dinamización agroecológica
Marc Badal compagina las tareas cotidianas en un caserío del Pirineo navarro con el trabajo de investigación y dinamización agroecológica.
Ha publicado artículos y libros relacionados con la desaparición del mundo campesino, las propuestas y prácticas agroecológicas, la biodiversidad cultivada, la crítica al modelo agroindustrial, etc.
Desde 2013 coordina Haziera, el archivo de semillas de la Fundación Cristina enea (Donostia). Es socio de la Red de Semillas de Navarra y colabora con Aleka, una asociación de productores ecológicos de semillas situada en Gipuzkoa.
Desde 2016, junto a Anne Ibáñez Guridi integran el colectivo Kanpoko bulegoa, un obrador artesanal de pensamiento aplicado que aborda la reflexión en torno a lo rural desde la intervención cultural. Desde Kanpoko bulegoa desarrollan proyectos de creación, trabajos de mediación cultural (programa Landarte del Gobierno de Navarra), docencia y comisariado.
En sus proyectos han colaborado con artistas como Perejaume, Future Farmers, Insalubre Cinémathèque, Susana Cámara Leret, Greta Alfaro o Ixiar Rozas.

