
Cuadragésimo sexta entrega del narrador y profesor universitario leonés, quien colabora en TAM TAM PRESS con una singular sección quincenal de pequeños relatos cuyo título, “Lenta es la luz del amanecer”, quiere ser todo un homenaje al fallecido escritor Antonio Pereira. En cada ocasión, los relatos aparecen ilustrados por el fotógrafo leonés AGUSTÍN BERRUETA.
→ El hábito y el monje
Por FRANCISCO FLECHA
Don Gonzalo, el último marqués de Pobladura, era un señorón de mucho porte que, la verdad, siempre iba hecho un abril, trajeado y elegante como si hubiera de ir a ver al rey, frío y distante como un abad de Montserrat, recatado y santurrón como novicia ofrecida a las Descalzas.
Que ni hablar necesitaba: una simple mirada o una leve señal con el bastón eran de más ley que el Código Civil.
Por eso, Dorotea, la chica de Armellada que servía a la marquesa, cuando le vio abandonar en calzoncillos la cama donde la sorprendió aquella madrugada, sólo acertó a decir:
—¡Ay, señorito, con lo que yo le respetaba, vestido de señor, y, visto así de cerca, se ha quedado usted en nada!
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- “Crónicas del reino menguante”, el blog de Francisco Flecha.