
Cuando una mirada es capaz de contarlo todo… a quien sabe leer en ella. Un nuevo micro-relato inédito del poeta afincado en Mansilla de las Mulas.
Por TOÑO MORALA
Era algo más de medianoche; la pequeña terraza albergaba a una pareja recostada sobre una hamaca. Tapados con una manta, ella dormía plácidamente, mientras el hombre, con las manos debajo de su cabeza, miraba al cielo fijamente… Al rato, ella se despertó, se desperezó y comentó:
—¡Si supieras lo que he soñado!
A lo que el hombre le contestó:
—¿Hablas de la estrella fugaz, esa que te soñó y te posó suavemente sobre la aurora boreal…?
—Pero… ¿Cómo lo sabes…?
El hombre se incorporó, le dio un beso y le dijo:
—¡Tu mirada estremece a la belleza… ella me lo cuenta todo…!