Juan Ugalde, en el MUSAC: “La exposición ‘La nave de los locos’ es una locura que refleja la locura en la que vivimos”

Por CAMINO SAYAGO

El artista vasco Juan Ugalde desembarca en el MUSAC este sábado 17 de junio con «La nave los locos”, un proyecto en el que vuelca su poliédrico trabajo, un collage de collages que recorre a través de casi un centenar de obras cuatro décadas de su trayectoria. A su propuesta se suma la investigación realizada en torno a las obras de la artista Tatiana Parcero pertenecientes a los fondos del museo y la colectiva “Exotermia”, que revisa obras de la Colección MUSAC en las que se reflexiona sobre los sistemas de montaje de exposiciones. Las tres se inauguran este fin de semana y permanecerán hasta el 7 de enero.

“Esta exposición es una locura que refleja la locura en la que vivimos”, asegura Juan Ugalde sobre la “La nave de los locos”, la retrospectiva que le dedica el MUSAC y que toma su título de un cuadro de El Bosco. “Es un cuadro que siempre me había impactado, tanto por los detalles como por lo que refleja. El Bosco trabajaba mucho sobre la mente del ser humano, sobre la locura, toda su obra es un disparate, tiene humor y también dramatismo. Y me pareció que en este momento reflexionar sobre que es la locura, tanto a nivel individual como a nivel colectivo, era el eje que podía mover todo mi trabajo en el presente y en el futuro. Estamos en este momento de la pulsión entre el eros y el tánatos, la pulsión de muerte, de esa autodestrucción hacia la que vamos en una inercia, como escribía Hesiodo, que no puede parar y ese placer de vivir lo mejor posible hasta que esto desaparezca es por un lado un poco individual y por otro colectiva, y esa mezcla entre los individual y lo colectivo me interesa”. Esta reflexión envuelve el viaje que propone el artista que navega a través de noventa obras por cuatro décadas de su polifacética trayectoria- desde 1982 a 2022- con la presencia del mundo onírico y abigarrado del pintor flamenco. “Me interesa la emoción y la reflexión. El arte tiene muchas vías y a mí esta mezcla de reflexión emotiva o emoción reflexionada es lo que me mueve a trabajar. En este repaso a cuarenta años ha habido muchas emociones y muchas reflexiones en los que han pasado muchas cosas, el homo sapiens se ha duplicado, nos hemos globalizado, nos hemos informatizado, nos hemos wifeado, y de alguna manera la exposición está en esa reflexión”.

La exposición presenta un collage de los collages del artista vasco. No es una presentación cronológica sino que se ha querido reproducir, tal como explica la comisaria de la exposición Nathalie Pariente, ese batiburrillo que compone la sensibilidad y el humor de la obra de Ugalde. “Mezclando distintas épocas, distintos materiales y situaciones, hemos querido recrear el proceso mental del artista y reproducir esta especie de caleidoscopio visual”. Así se pueden ver muchos elementos heterogéneos, locos y disparatados: personajes con cabeza en forma de dinosaurio, edificios, autopistas, personajes disfrazados, electrodomésticos de desguace, situaciones grotescas y burlescas de toda índole, ya que el humor es una constante que atraviesa su obra.

Estética del exceso

Aunque Juan Ugalde define su obra como eminentemente pictórica, el collage es el eje central de su trabajo que también abarca el dibujo, el vídeo, la instalación, la performance, lo digital, y se extiende a sus colaboraciones con diferentes colectivos artísticos como el histórico Estrujenbank (1989-1993) o el actual Imagina Escorial. . “El collage no es solo la columna vertebral, es también la idiosincrasia de su obra”, puntualiza Pariente. “Su obra que tiene que ver con una reflexión sobre el exceso, la vorágine, la desmesura que se vive en la actualidad con el flujo de imágenes, de información, de datos”. El collage representa su vínculo con la realidad, el medio de expresión con el que se ancla a lo cotidiano, y para ello utiliza cromos, postales, piezas de madera, tejidos, fotografías cubiertas de pintura o retocadas con Photoshop, serigrafías o baldosines pegados en el lienzo, así como vídeos.

En palabras del Álvaro Rodríguez Fominaya “es un artista desmesurado que ha creado arte y retratado en su obra la sociedad española durante más de treinta años”.

Cuarenta años de trayectoria

Juan Ugalde (Bilbao, 1958) ha vivido en Madrid, Nueva York y Berlín en distintas etapas de su vida. En la actualidad vive y trabaja en El Escorial.

Comienza su trayectoria artística a principios de los años 80 en plena movida madrileña donde desarrolla una pintura influenciada por el expresionismo abstracto y el pop anglosajón. Entre 1986 y 1989 viaja a Nueva York y allí conoce al poeta Dionisio Cañas con el que fundará el colectivo Estrujenbank junto a Patricia Gadea, uno de los colectivos socios políticos más relevantes de España durante la segunda mitad del siglo XX.

En 1990 emprende una carrera en solitario y hasta el 2000 desarrolla una obra característica, muy reconocible, que se caracteriza por la fusión de pintura y fotografía: en este periodo trabaja con fotografías que toma el mismo “voluntariamente borrosas, mal encuadradas”, y que aplica sobre un lienzo al que incorpora una pintura gestual, similar al dripping, y en el que, muy a menudo, aparece un pequeño collage, con contornos muy precisos que es como un pequeño guiño en la composición. A partir de 2010 abandona paulatinamente la fotografía en blanco y negro y comienza a utilizar un amplio abanico de materiales como baldosas, trozos de madera, serigrafía.

Juan Ugalde ante una de las obras que integran la exposición La nave de los locos, en el MUSAC. Fotografía: Camino Sayago.

La obra de Ugalde se puede encontrar en las principales colecciones del país, entre ellas las del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, Artium, Museo Patio Herreriano, Colección Banco de España, Colección Marcelino Botín, o Fundación La Caixa.

La muestra se acompaña de una publicación que incluye imágenes de todas las obras expuestas y varios textos realizados por la comisaria de la exposición, Nathalie Pariente, el poeta y ensayista Roger Wolfe, el historiador Horacio Fernández y el crítico de arte Quico Rivas, así como una selección de textos del propio Juan Ugalde.

EXOTERMIA, una galería del siglo XVIII

La nueva revisión de los fondos del museo, comisariada por Álvaro Rodríguez Fominaya, lleva por título “Exotermia. Semiótica de la ubicación en la Colección MUSAC”. Esta colectiva recrea una galería de pintura del siglo XVIII, que invita a reflexionar sobre los sistemas o los modelos de diseño expositivo y su relación con el valor simbólico que se asigna a las obras de arte. “Incide en la idea de visibilizar la Colección MUSAC que refleja el tránsito del siglo XX al XXI y tiene vocación atemporal” destaca Fominaya.

La exposición abre un diálogo entre 70 obras pertenecientes a la Colección MUSAC (pintura, dibujo, escultura, fotografía o tapiz);y tres esculturas clásicas procedentes de la colección de reproducciones artísticas del Museo Nacional de Escultura. Las tres esculturas seleccionadas son diversas representaciones de la Antigüedad Clásica: Apolo sauróctono (Taller de Eugène Denis, 1.883), Diadumeno Farnesio (Taller de Domenico Giovanni Bruccani, 1.887) y Apoxiomenos (José Trilles y Badenes, 1890).

Vistas de la exposición “Exotermia. Semiótica de la ubicación en la Colección MUSAC”.

Para el montaje de la muestra se ha tomado como ejemplo el proceso de instalación concebido en la Royal Academy de Londres donde, partiendo de una línea imaginaria situada por encima de la cabeza del visitante, se estableció cómo se cuelgan los cuadros siguiendo una jerarquía relacionada con los diversos géneros de la pintura. En esa línea imaginaria predominan los retratos y la pintura de historia, en formatos de mayor tamaño, para ir situando el resto de las obras en un plano superior o inferior.

En «Exotermia», la arquitectura del edificio de Tuñón y Mansilla juega también un papel trascendente a la hora de definir la disposición de las obras en el espacio, al tener que conformar este canon a un lugar zigzagueante y alejado de la galería de pintura desde la que se ha partido en esta reflexión.

Entre las 70 obras que forman la exposición se encuentran entre otras, las piezas de los artistas Dan Attoe, Natividad Bermejo, Philip Lorca di Corcia, Gregory Crewdson, Elena Fernández Prada, Till Freiwald, Alberto García-Alix, Roland Fischer, Ellen Kooi, Jen Lui, Gilda Mantilla, Caio Reisewitz, Delhy Tejero o Belén Uriel.

El cuerpo y el autorretrato en Tatiana Parcero

Tras dos primeras entregas dedicadas a los fotógrafos Jordi Bernadó y Concha Prada, esta nueva muestra en Proyecto Vitrinas en torno a obras pertenecientes a la Colección MUSAC, está dedicada a Tatiana Parcero (México D.F., 1967), a través de sus obras Cartografía interior #35, Re-invento #22, Re-invento #19; así como seis piezas pertenecientes a su proyecto Actos de fe.

Desde principios de la década de los noventa, la obra de Tatiana Parcero se ha concentrado en el cuerpo y el autorretrato, incorporando diversas técnicas mecánicas de fotografía, imagen digital o vídeo con las que retrata el cuerpo humano en búsqueda de planteamientos estéticos y conceptuales, como son la reconstrucción de experiencias y conceptos como la identidad, la memoria, el territorio o el tiempo.

Tatiana Parcero. Caso de estudio sobre la Colección MUSAC.

La iniciativa “Casos de estudio sobre la Colección MUSAC” nace en marzo de 2022 con el fin de fomentar el conocimiento de los fondos del museo y dar a conocer el resultado de las investigaciones y estudios que se llevan a cabo en torno a las obras y artistas que los integran. Se llevan a cabo mediante una estrecha colaboración entre el personal encargado de la gestión de la colección y el o la artista en cuestión; y se abordan desde un punto de vista interdisciplinar, de tal manera que se muestra la trayectoria del autor; los aspectos técnicos y conceptuales de la obra; sus necesidades de conservación; el modo de producción; su posible adscripción a escuelas; su historia dentro del museo; su participación en exposiciones, etc.