Por CAMINO SAYAGO
La artista leonesa María Luisa Fernández (Villarejo de Órbigo, 1955) es otra de las protagonistas de la jornada inaugural en el MUSAC este sábado 8 de junio. “8.068.807.215. Sangre en oro” es su primera exposición individual en un museo en los últimos ocho años y reúne su producción más reciente. Una obra que “da forma a ese futuro terrible que está por venir y muestra el plan de lo que sucederá si no se remedia”.
Se trata de una de las tres nuevas exposiciones de la temporada de verano del MUSAC; las otras dos llevan la firma del artista vasco Prudencio Irazabal y de la videoartista suiza Pipilotti Rist. Las tres se podrán visitar hasta el 13 de octubre.
La cifra que da título a la exposición “8.068.807.215. Sangre en oro”, hace referencia a la población mundial y a la idea de que un crecimiento excesivo nos va a llevar a la tragedia. “Es la cifra correspondiente a cuando yo escribí el primer texto en octubre del año pasado. Cuando Maria Luisa hizo otra exposición en 2018 eran siete mil y pico y ahora ya estamos en 8.154.000.000 millones de habitantes, así que es muy evidente que titular con estos números tiene que ver con registrar también como va sobrecreciendo la población”, explica su comisario Sergio Rubira. Más de ocho mil millones, una cantidad que en pocos años siguiendo la espiral de Fibonacci se incrementara exponencialmente y que se aproxima a otra, a la que contiene las medidas de la belleza: la divina proporción o el número de oro, ese metal en el que el sistema de sobrexplotación actual convierte la sangre.
María Luisa Fernández manifiesta esta preocupación por la naturaleza y los animales que están desapareciendo en la búsqueda de una escultura que tenga significado más allá de sí misma y que le ayude a asumir lo que ocurre a su alrededor. “Lo que pretende es afectar a las emociones de los espectadores más que hacer un discurso político, que impacte emocionalmente, que tenga que ver con los sentidos y que el espectador pueda reflexionar a partir de su experiencia en la exposición”, señala Rubira.
En esta muestra en el MUSAC retoma una de las series sobre las que ya había trabajado en los 90, Artistas ideales, y amplia la exploración de otros materiales. En esa serie convertía las formas geométricas de los gráficos circulares de las estadísticas en elementos escultóricos – en madera y pintados al óleo en blanco o negro-, que eran colocados unos encima de otros y, más tarde, sobre colchones de gomaespuma, generando composiciones que adquirían una cualidad, que el crítico de arte Manel Clot calificó como antropométrica. Aquí estas piezas aparecen colgadas del techo y adquieren una dimensión monumental. “Son Artistas ideales abrasados porque ya no están pintados, sino que el color negro y las iridiscencias son el resultado del proceso de carbonización que se produce al quemar la superficie de la madera con la que están hechos”. “
Tal como recuerda su comisario, “en los años noventa los artistas ideales se referían al modo en que se había construido la idea de genio y a la forma en la que María Luisa Fernández se situaba respecto a estos estereotipos. Pero ahora, los interrogantes incluyen como si sitúan los artistas frente a la realidad y lo que está ocurriendo”.
Sostenibilidad
La artista leonesa también presenta una serie de dibujos recientes que tienen algo de representaciones anatómicas, en las que han desaparecido los músculos y los huesos y solo han quedado las arterias y las venas. No obstante, si se observan con atención, se descubren las siluetas de unos animales que se mueven nerviosos por la hoja de papel. Estas siluetas de animales salvajes, muchos a punto de desaparecer, llenan otros de los dibujos como si fueran sombras: “La forma de trabajar de María Luisa es sostenible en sí misma porque si utiliza para una instalación placas de metacrilato en la que están ausentes los animales, que quedan en vacio, lo que resta de esa pieza lo utiliza para una serie de dibujos en los que recupera la silueta del animal y a partir de ahí construye otros dibujos”.
Pero es que también algunos de los dibujos están hechos sobre obras anteriores suyas que ha vuelto a pintar encima. O la serie `Las Coronas’ que está también realizada con restos de madera de otras obras que presenta en esta amplia muestra individual. Una poética de la extinción que apunta a los residuos que producen los habitantes de la Tierra y a los que alude el número del título de la exposición.
Información práctica
- Título de la exposición: María Luisa Fernández. 8.068.807.215. Sangre en oro
- Artista: María Luisa Fernández (Villarejo de Órbigo, León, 1955)
- Comisariado: Sergio Rubira
- Fechas: 6 de de junio de 2024 – 13 de octubre de 2024
- Lugar: MUSAC. Salas 4.1 y 4.2
- Inauguración: sábado 8 de junio de 2024, 19:00 a 21:00 horas
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