De Valencia a ‘Fanzine León’… y van 3 años

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Por SANTOS M. PERANDONES

Me llamo Santos M. Perandones, soy fotógrafo, ilustrador y docente desde el año 1998.
La historia de Fanzine León comienza en Valencia en la década de los 90, cuando colaboro en  radios independientes, revistas y propuestas culturales de la ciudad, entre las cuales está la edición y maquetación de la revista de APIV (Asociación Profesional de Ilustradores Valencianos).
Los fanzines están muy presentes en mi vida desde entonces, al igual que la fotografía de conciertos —cuando obtuve la primera fotografía de Nick Cave en su primera visita a España, decidí seguir en esto—. Ya han pasado muchos años desde entonces.
La creación de «Murry Purry Project» me proporcionó grandes experiencias en mi vida, pero la duración de este medio no fué muy larga. Algunos Purple Weekend vieron pasar mi cámara y mis crónicas con este fanzine.

Gracias a Julio César Álvarez comienzo, en León, una etapa nueva en mi vida, en la revista cultural «Azul Eléctrico» desde sus inicios, donde colaboro con alguna fotografía, varios artículos y algún diseño de cartelería. Unos números que me dieron grandes satisfacciones.
Con mi salida de «Azul Eléctrico» se ponen las primeras bases de «Fanzine León«, pero antes un paso durante un año en «Valladolid Web Musical», llevando el apartado de León, el que se vieron muchas crónicas de conciertos y fotografías mías en este medio online.
Por circunstancias de la vida, el proyecto en «Valladolid Web Musical» termina inesperadamente para mí, y es entonces cuando despega «Fanzine León». Con pocos medios y con el apoyo de varios escritores, músicos, salas y promotores… decido emprender el proyecto de forma contínua.

Dar las gracias a Felipe Zapico, Vicente Muñoz Álvarez, Juancho Lopez (The Crepitos), Alejandro Díez (Cooper), Oscar y Mariaje (Boneidol), Constan Chao (Knock Knock management), Juanpa y Eva (Taberna Belfast), Estudio54 y el Gran Café por creer siempre en mí, y sobre todo en esa primera etapa del Fanzine. Con el tiempo la lista de gratitud ha crecido y no tendría espacio para poner a todas las personas que día a día hacen posible todo esto.

Este año 2012 en Fanzine León, con la ayuda de los anunciantes que creen en este medio y la multitud de visitantes en la web, las secciones han crecido, haciendo posible seguir adelante en estos tiempos tan difíciles por los que estamos pasando.

En la actualidad Fanzine León consta de:

• Musicales, un espacio donde los conciertos cobran personalidad.
• Culturales, el lugar donde se mezcla la pintura, la fotografía, el cine, las exposiciones…
• Visitas, nueva sección de Fanzine León en la se vá visitando algunos espacios de la ciudad y provincia,  exposiciones, estudios, personas,….
• Entrevistas, uno de los puntos fuertes, donde las bandas leonesas hablan sobre ellas.
• Discos, una sección que apareció de forma caótica y que con el tiempo va cogiendo forma.
• Anónimos, es el espacio donde la gente de León y provincia nos cuentan algo sobre sus proyectos pasados, presentes y futuros.
• Especiales, los festivales y encuentros musicales van cobrando especial interés en nuestra provincia y alrededor.
• Libros/Comic, «de reciente creación».
• Galería, un espacio esencial y ya necesario en la web. Las fotografías antes publicadas en el facebook de Fanzine León ya tienen su lugar.

Un largo y difícil recorrido que ahora más que nunca, cuando Franzine León cumple ya 3 años, se ha convertido en una realidad.

¡GRACIAS A TODOS!

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Más:
De una entrevista de Julio César Álvarez con Santos M. Perandones (en ‘Dale la vuelta a León):
—Fanzine León y VooDooChilD son dos proyectos tuyos que dejan ver un sello muy personal e infinidad de esfuerzo. ¿Cómo los definirías a ambos?
—»Fanzine León soy yo mismo expresando mis gustos y mis inquietudes. Un proyecto en constante crecimiento que requiere de una gran dedicación, ya que se actualiza a diario. Paralelamente está VooDooChilD Estudio, que es mi faceta artística y mi modus vivendi. Es mi forma de entender la fotografía, como ésta llena todos los rincones de mi propio día a día. Una vocación por la luz, una adicción que ha traspasado las primeras fronteras del carrete fotográfi co, de ahí al laboratorio en casa hasta llegar a la actual fotografía digital. (…)»