
El poeta Juan Carlos Pajares actuará este miércoles, 8 de octubre, como pregonero de la Feria del Libro Antiguo y de Ocasión de León, en un acto que comenzará a las ocho de la tarde en el Salón de los Reyes del viejo edificio consistorial (Plaza de San Marcelo). La entrada es libre.
Juan Carlos Pajares, colaborador habitual de Tam Tam Press —donde mantiene la sección “El aforismo del Pájaro”— ha escrito un sugerente poema para este pregón, “Desde el alma, y el alma en un dedal”, que reproducimos bajo estas líneas.
Además, la asociación de libreros de viejo (Alvacal) que preside Felipe Martínez ha editado una preciosa plaquette con el poema, ilustrado con grabados de William Blake, con una tirada de 250 ejemplares, numerados a mano, de los que se relagarán cien a aquellos leoneses que acudan al acto y acrediten su amor a los libros.
La Feria del Libro Antiguo y de Ocasión abrirá sus puertas el viernes, 10 de octubre, y se mantendrá hasta el próximo 2 de noviembre en la Plaza de San Marcelo de la capital leonesa. Además de recorrer las casetas y rebuscar entre los ejemplares en busca de tesoros literarios, los visitantes podrán disfrutar de una exposición de fotografías de Agustín Berrueta, titulada “Lustrosa herrumbre”, en el edificio del viejo Consistorio.
Desde el alma, y el alma en un dedal
que apenas se distingue
entre la ferralla apilada al fondo de un pozo negro y seco,
en el fondo de una sima,
la más angosta, de una piedra que orbita alrededor
de una estrella, más allá de Orión,
más allá de lo que ni siquiera conocemos,
y que es el centro del mundo,
donde vuestros dioses ni cosquillas me hacen,
me acuerdo de un beso entre miles de labios,
de abrazos entre multitudes,
de una mirada furtiva e irrecuperable al paso,
del gato canela que hacía prospecciones sanguíneas en mi piel,
¿lo veis?, es mi centro,
y desde el alma os doy la capacidad de amar,
os regalo el tacto intacto, un nuevo sentido
para que lo disfrutéis, y os doy también la voluntad de ver.
∴
Desde el alma, y el alma en un dedal
olvidado
en el magma viscoso que se mantiene,
puedo recordar una tempestad sin testigos,
un nido que se precipita al suelo,
el surco subrepticio que dejó la víbora,
el vaho deshaciéndose en el cristal de las golosinas,
la danza del fresno,
las cenizas humeantes de las praderas
y os doy la fuerza
para levantar los páramos y sacar los esqueletos de los
masacrados
para que les pongáis carne
y ojos
y uñas
y sangre
y les devolváis los recuerdos
y lo que nunca supieron.
∴
Desde el alma, y el alma en un dedal
perdido en el caos
os devuelvo la inteligencia de los mansos,
la sabia paciencia de los que nunca esperan nada,
la generosa leche de las madres,
los jugos que guardan los frutos, los amaneceres limpios.
Desde el alma, y el alma en un dedal
de un cosmos
sumergido en una gota de agua del deshielo,
escribo para festejar la vida.
JUAN CARLOS PAJARES