Esta casa, que fue habitada por la saga poética de los Panero, inicia un nuevo rumbo como museo. La inauguración será este viernes 7 de octubre a las 12:00 horas, y desde ese momento abrirá sus puertas, de forma gratuita. Para conocerla mejor se han programado dos visitas guiadas y teatralizadas, que tendrán lugar a las 17:30 y a las 19:00 horas, previa inscripción en el Ayuntamiento de Astorga.
El que fuera hogar de los Panero, propiedad del ayuntamiento maragato desde hace dos décadas, será a partir de este viernes el Museo Casa Panero. Un centro de investigación, y el tercer museo municipal de Astorga, que cuenta con una significación especial, tanto en el ámbito local como en el nacional y americano. Leopoldo Panero y su hermano Juan, fueron destacados poetas, y en el caso de Leopoldo con cometidos importantes como la secretaría de las Bienales Hispanoamericanas de Arte. Una saga poética que ha tenido su continuación con Juan Luis y Leopoldo María Panero Blanc.
La Casa de los Panero ha albergado, temporalmente, dado el carácter abierto de esta familia, poetas relevantes de las generaciones del 27 y del 36, entre ellos a Gerardo Diego (que denominó como “Escuela de Astorga” a Juan y Leopoldo, Ricardo Gullón y Luis Alonso Luengo). Y en ella tuvieron lugar acontecimientos históricos destacados en los tiempos de la 2.ª República y en la postguerra. Justino de Azcárate, nombrado ministro de Estado al estallar la Guerra, se refugió en esta casa y sería canjeado por el falangista Raimundo Fernández Cuesta.
Con una superficie musealizada superior a los 1000 m2, la casa, rehabilitada y convertida en museo, contiene doce salas expositivas, para los autores de la “Escuela de Astorga”, Gerardo Diego, César Vallejo, y otros autores astorganos muy relevantes en los ámbitos de la arqueología, la historia, la etnografía y la cinematografía (“El desencanto”, entre otros filmes, sigue siendo una película estimada). Asimismo, disponen de sala expositiva la familia de Leopoldo Panero, su esposa Felicidad Blanc, y sus hijos Juan Luis, Leopoldo María y Michi Panero.
La musealización, en sus aspectos formales, ha sido realizada conforme a los criterios museísticos del siglo XXI. Cuenta con importantes fondos documentales, muy relevantes para la literatura española, sobre todo epistolarios, adquiridos por el Ayuntamiento o bien legados por parte de algunas de las familias de los autores mencionados.